viernes, mayo 18, 2007

Relato: TRAVESÍA EN BUENOS AIRES (VOL. 1)

Unos cinco años atrás. Habíamos terminado. El viaje a Ventanas habría sido distinto, si no hubiese tenido la decisión de no responder a su llamado y haberme metido a la fuerza dentro del furgón que mi padre contrató para que partiéramos a la playa.
¿Porqué cuento este preámbulo? Pues, porque la imagen de ella esperando mi voz junto a su teléfono me martilló durante toda la travesía y la llegada. Mi hermano mayor disfrutaba de todo, como el veinteañero con actitud preadolescente que siempre ha sido, y mi hermana menor, por entonces una verdadera púber, dividía su atención entre los dibujos animados y las primeras miradas hacia los chicos de las casas vecinas.

Como una forma de amilanar mi propia culpa, decidí andar cabizbajo y amurrado todo el día, y responder con sonidos guturales ante cualquier frase que se me dirigiese. Para qué decir las salidas: totalmente enclaustrado, salí una sola vez en la noche, y las siestas que nunca he tomado tuvieron auge durante las tardes, ya que jamás fui a la playa.

Salvo ese día.

Ahí estaba, errando por la arena, odiando mi existencia, cuando apareció mi hermana entre la multitud:

“ - ¿Nademos?”

Niños.

“- Tu no sabes nadar…”
“- ¡Enséñame!”

Bueno, tampoco recuerdo porqué, pero le tomé la mano y me adentré unos metros en el mar.

Me considero un hombre precavido, y por eso le expliqué a la señorita que iríamos hasta las boyas (a unos diez metros mar adentro), y luego nos volveríamos. Caminamos unos seis metros sobre la arena, con el agua hasta la cintura y sentimos que flotábamos.

“ - Oye, las boyas se alejan” – me dijo ella
“ – No es posible. Las amarran a cada extremo de la playa. En Valparaíso llegué hasta ellas”
“ – Ya Sherlock.”

En aquellos tiempos me tenía ese apodo, porque asombrosamente fue la única en la casa (después de mí) que aguantó las dos horas y media de “La Vida Privada de Sherlock Holmes”. Y antes de que apareciera “Chicago” en su vida, solía decir que era su favorita.


Precisamente en la cinta del detective iba pensando cuando llegamos a las mentadas boyas. Ella tenía razón. Primero, no eran pelotas hinchadas, de plástico hiperduro, sino que algún funcionario de aquella municipalidad pintó botellas no retornables de color naranjo fosforescente, y amarró todo desde un solo extremo. Nos habíamos alejado demasiado, y mi hermana, gracias al cielo, por lo menos había aprendido a flotar.
Cuando comenzamos nuestro retorno, ella comenzó a preguntarme sobre mi ex, y quise hundirle el rostro en el océano, pero me retuve cuando comenzamos a pisar de nuevo la arena.

En algo de medio minuto, seguíamos parados en la misma posición, ella interrogándome sobre mi chica, yo evadiéndola, y ambos caminando contra el mar.

De pronto, sin darnos cuenta, estábamos de nuevo cerca de las boyas.

“ – Volvimos al mismo lugar Sherlock” – me dijo ella, despreocupadamente.

La miré muy asustado y tragué saliva...

... Una corriente nos había arrastrado .....



(Continuará)

4 comentarios:

Paula García dijo...

Me ha encantado tu relato, realmente bueno pero ¡por favor! salgan del agua.. no soporto la idea de que estén a la deriva... saludos!

Unknown dijo...

:O Quedé totalmente con la boca abierta... pero partamos desde el principio.

Hola: Hace rato que no pasaba por aquí, aunque no me pierdo ninguno de tus interesantes capítulos (que al fin sé que es tu vida y de qué se trata, jajaja, harto vieja la pregunta, pero todo el que pide, recibe. XD) y este me gustó demasiado. aaaaahhh, me dejaste metido en la historia si pos, ¿qué onda?, ¿Qué sucede después? noooooooooooooo... no aguanto. jajajaja. Bueno, avísame para la próxima publicación. Mi cuarto capítulo está craneándose, así que pronto saldrá. Me gustan mucho tus comentarios. Cuando termine la novela, revisaré cada capítulo y haré la edición de acutalización para cambiar todo aquello que sobre y ponerle lo que falte, etc.

Bueno, te quiero mucho hermano. Espero en tu vida espiritual estés bien. Todos necesitamos una mano amiga de vez en cuando. www.rhemails.blogspot.com

Ese es el blog de mi brother. Ahí si tienes ganas lo revisas. Xaitos.

Ah. Porfis, si tienes un tiempito chiquitito, me posteas en mi flog. www.fotolog.com/skrito XD

Bendiciones

Andreita... dijo...

Raulis, muy buen texto, aunke encontre unos pequeños pero grandes detalles, que hernan -el ayudante de Velis te hubiera marcado con rojo XD-jajaj...(ojo con el uso de los ¿por qué? y el porque)
Bueno aparte de eso, muy buen relato, me gusto muxito....y sabe a veces me encanta escribir historias que no precisamente hable de mí....

Yapu querido...un besote y se me cuida....ánimo con la dieta y los ejercicios del Gym....todo esfuerzo valdrá la pena para su salud.

Cariños mil

Anónimo dijo...

kien iba a pensar ke la rakel aprenderia a flotar..
o ke la municipalidad de esa playa no se encargara de utilizar los elementos necesarios para hacer de esa playa, una playa más segura...

(momento de silencio)


tu sabes ke en la vida uno siempre se topa con gente es pecial ke tiene la super capacidad de poder expresarse con simples palabras pero a la vez complejas...en el sentido del cual se kiera ver...
me encanta leer tus anecdotas, chascarros, experiencias de vida, leer un análisis completo de un pekeño momento en tu vida y comprender en un solo instante, ke no es pekeño, sino ke un gran complemento de tus historias de vida...

eres una persona muy especial para mi rauliito ^^ cuando tenia pena y escribia mis experiencias vividas en un papel todo roñoso, el único ke creo ke entendía lo ke escribía eras tú...kizás todos decian "ke lindo escribes" pero ke entendían de eso..nada..
como dice un dicho " nadie entiende al poeta". bueno no soy poeta pero soy un proyecto raro de serlo, osea, algo parecido..
y tu? eres una persona capaz de plasmar en un blog, palabras ke no aburren, ke se entienden, ke entretienen...yo solo entristezco a la gente XD

te kiero rauliito muxo muxo!

(8) no dejes ke muera hoi el sol (8)
jajajaj